La sociología a través del cine, algunos apuntes sociológicos.
Jessica
Betzaida Islas Amaro.[1]
[1] Licenciada
en Sociología por la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Azcapotzalco.
Existen
dos conceptos que han sido muy importantes para la sociología moderna, los
cuales ofrecen definiciones muy ricas para poder analizar el cine desde una
perspectiva social: El primero se le conoce como Contrahegemonía expuesto
por el sociólogo Italiano Antonio Gramsci; y el segundo es el de Dispositivo,
explicado por el filósofo francés Michel Foucault.
El
cine, al igual que otras expresiones artísticas, como la danza, la pintura o la
fotografía, se puede definir como una manifestación o expresión estética que
busca el autoconocimiento y reflexión de la sociedad, pues al entrar en
contacto con las subjetividades de las personas, logra en cierta medida,
impactar en sus perspectivas y en ocasiones en sus comportamientos. El cine se
ha considerado como un medio valido y legítimo para representar nuestras
emociones y experiencias humanas, y en ese sentido, se puede explicar su rol
social en relación con el concepto de Dispositivo Cultural que propone
Foucault.
El
autor lo define como una red heterogénea que incluye discursos, instituciones,
estructuras arquitectónicas, decisiones regulativas, etc. Que, en determinado
momento histórico, tuvo como función esencial responder a una urgencia, por lo
que el dispositivo tiene una función esencialmente estratégica. En ese sentido,
el cine ha fungido como un medio fundamental en épocas determinadas para legitimar
ideologías y resaltar acontecimientos históricos importantes, Manteniendo una
agenda que puede simpatizar con una Hegemonía Cultural, (la cual según Gramsci
se compone de bloques dominantes con una dirección política e ideológica
especifica).
Por
otro lado, así como existen las Hegemonías pueden emerger las Contrahegemonías,
y aquí el Cine también juega un papel importante, ya que puede desarrollar sus
propias propuestas alternativas que brinden representación y visibilización de
los problemas sociales, generando a su vez, una conciencia crítica que busca
dar un nuevo origen o un cambio de sentido a la sociedad. En ese aspecto, las y los cineastas podrían ser
considerados como Intelectuales Orgánicos, que, según Gramsci, a través de sus
expresiones estéticas buscan brindar una narrativa nueva a las cosas.
El
trabajo de la o él director, así como del guionista de cine siempre va a estar
permeado por una visión, que corresponda a intereses de un grupo social. O en
todo caso, si solo incluye su propia perspectiva, también se encuentra guiada
por el contexto social, la cultura, por su proceso de socialización, y por todo
aquello que ha consumido en los medios. En otras palabras, siempre habrá un
discurso que lo anteceda al momento de crear una película.
A
continuación, voy a mencionar algunos ejemplos de películas en los que la
perspectiva sociológica enriquece de una manera excepcional cada obra:
1. El
Club de la Pelea (Fight Club), 1999.
Esta
película sigue la historia de un protagonista que esta aburrido e insatisfecho
con su vida profesional y social. El protagonista conoce a un carismático
personaje junto al cual funda un club de lucha clandestino al que luego se
unen, más hombres cansados de su rutina y de la sociedad consumista en la que
viven. Con el paso del tiempo el club de la lucha empieza a crecer y se vuelve
una organización que orquesta revueltas, lo que la pone en el ojo de las
autoridades. Algo muy interesante es que en esta película se refleja el
sentimiento de desesperanza que se vivió en la década de los 90 y principio de
los 2000. Con la caída del Muro de Berlín en 1989 la juventud empezó a sentir
que la única realidad posible era el capitalismo, el cual también estaba muy
desprestigiado. Las relaciones interpersonales y las tradiciones también
empezaron a degradarse, cada vez menos personas estaban interesadas en tener
una familia y las relaciones solían ser cortas. En la película se menciona
varias veces la insatisfacción con el sistema que nos hace creer que el valor
de una puede medirse por sus posesiones materiales. De hecho, una idea famosa
de la película es que “tenemos empleos que odiamos para comprar cosas que no
necesitamos”. La película puede estudiarse desde la sociología de la desviación
y la sociología industrial. Puede interpretarse desde el funcionalismo con la
teoría de Anomia Émile Durkheim, desde el conflictualismo con la teoría de la
lucha de clases de Marx y Engels y con la teoría de la modernidad liquida de
Zygmunt Bauman. Y desde el interaccionismo simbólico con los estudios del
consumo simbólico.
2. Adiós
a Lenin, 2003.
Este
filme narra la historia de Alexander, un joven descontento con el sistema de la
República Democrática de Alemania, también conocida como Alemania Oriental,
cuya madre es leal al régimen y se enorgullece de sus ideales socialistas.
Después de sufrir un ataque al corazón, tras ver a su hijo en una manifestación
en contra del régimen, su madre queda 8 meses en coma, tiempo durante el cual
se da la caída del Muro de Berlín y empieza el tiempo de instauración del
capitalismo Liberal en la Alemania Oriental. Los médicos le advierten al chico
que cualquier sobre salto podría causarle otro atraque a su madre y que este
podría ser mortal, por lo que el Chico decide hacer todo lo posible para que no
se entere de la caída del régimen.
Esta
película expone el profundo descontento que tenía la población, especialmente
las y los jóvenes con el régimen marxista-leninista de Alemania Oriental, pero
también muestra la decepción que se llevaron muchos al ver que el liberalismo
no era como esperaban. En la película también se muestra las diferencias de
intereses entre jóvenes y mayores, a las y los jóvenes les interesaba obtener
mayor libertad mientras que los mayores añoraban la tranquilidad que sentían
con el régimen anterior. Así mismo el protagonista mediante las noticias que se
inventaba para su madre crea una suerte de síntesis entre ambos sistemas que
representan una forma idealista de organizar a la sociedad. Esta película se
puede estudiar desde la sociología política y puede interpretarse con la teoría
de Weber sobre la burocracia, la teoría de élites y la teoría del pluralismo.
3. Güeros.
2015.
Película
mexicana cuya historia se sitúa en Tomás, un adolescente que llega a vivir con
su hermano a quien le dicen sombra, y que es un estudiante de la UNAM que no se
adentra en los asuntos políticos de su universidad y tampoco va a clases. A los
pocos días de la llegada de Tomas sale la noticia de que un cantante que tanto
su difunto padre como ellos idolatraba esta convaleciente y morirá pronto. Es
aquí donde empren su viaje por la CDMX para despedirse él. Esta película
se podría decir que es una radiografía a los años 90, situada en el movimiento
estudiantil que paralizó a la UNAM, y que a su vez toca temas como la
discriminación racial, la segregación cultural y política estudiantil, haciendo
énfasis en una sociedad apática que se la vive esperando que sus problemas se
resuelvan por sí mismos. Esta película se puede estudiar desde la sociología de
la cultura y de las relaciones étnicas y se puede interpretar con las teorías
del conflicto.
Sin duda alguna, el cine sigue siendo una gran fuente de entretenimiento que combinado con la perspectiva sociológica nos brinda la interpretación de un espacio que por naturaleza implica procesos de socialización, de relaciones sociales y de legitimación de preferencias.
Bibliografía
Foucault,
Michel (2002), “El sujeto y el poder”, en Laura Páez (Comp.), Vertientes
contemporáneas del pensamiento social francés. Ensayos y textos, ENEP
Acatlán-UNAM, México, pp. 417-434.
Gramsci, A. (2017d). "La formación de los
intelectuales". Traducción de Manuel Sacristán. Cuadernos de la Cárcel 12,
§1. Recogido en A. Gramsci, Escritos. Madrid: Alianza.
Comentarios
Publicar un comentario